Glorifícate en Chile, Señor oh Rey de Gloria
por tu santo evangelio bendice a mi nación
y líbranos de pestes, Señor, y de la guerra
y que toda mi Patria goce tu bendición.
Señor levanta obreros
fervientes en tu iglesia,
hermanos consagrados de todo corazón
que corran por las calles
llevando el gran mensaje
porque ya Cristo viene
a buscar lo que él ganó.
Esfuérzate buen siervo y gana la corona
trabaja y no desmayes, contigo es el Señor,
no mires a los hombres porque maldito eres
conviértete a Cristo y tendrás de Él perdón.
Bendice, esta tu obra, con gran avivamiento
tu espíritu Santo hable a cada corazón,
y limpia toda mancha y todo decaimiento
levanta a tus hijos que duermen con su don.
Y cuando Cristo venga con toda su potencia
la corona de vida pondrá sobre tu sien,
y vestiduras blancas y palmas en tus manos
para vivir por siempre con él en el Edén.