Te alabamos, ¡oh Dios!
Por tu hijo de amor,
que murió en el calvario
por mí, pecador.
¡Aleluya, gloria a Cristo!
¡Te alabamos, Jesús!
¡Aleluya, gloria a Cristo!
Te alabamos, amén.
Te alabamos, ¡oh Dios!
Por tu espíritu de luz
que mostró nos a Cristo
clavado en la cruz.
Te alabamos, Jesús,
cordero inmortal,
que mi alma has comprado,
y librado del mal.