Un poco, poquito de tiempo esperemos,
que el que ha de venir,
Jesús pronto vendrá,
orando, leyendo y cantando velemos
que pronto oiremos el grito: “¡aquí está!”.
Muy pronto vendrá,
muy pronto vendrá.
Y no tardará y no tardará.
Con mando, y con voz de un arcángel del cielo,
y al son de trompeta el Señor bajará
así lo esperamos con ansia y anhelo
y muertos o vivos nos recogerá.
A los que en Jesús han dormido, sabemos
que Dios juntamente con él traerá.
Los que nos quedamos su cara veremos
al mismo momento en que él nos llamará.
Aquellos que han muerto serán los primeros
que Cristo a su mando resucitará;
nosotros los vivos seremos postreros;
mas junto a Jesús nos arrebatará.
Arriba en las nubes, ¡encuentro glorioso!
Jesús a los santos aparecerá;
con él en la gloria de eterno reposo
por él rescatados, Jesús nos pondrá.