Por fe en Jesús el Salvador,
se hace salvo el pecador;
sin merecer tan rico don,
recibe plena salvación.
¡Oh, excelsa gracia del amor!
Que Dios perdona al pecador,
si presto está a confesar
su culpa y en Jesús confiar.
No hay otro autor de salvación,
pues Cristo obró la redención.
La vida antigua ya pasó,
y todo nuevo se tornó;
aquí cual peregrino es;
hogar con Dios tendrá después.
Aun cuando nada tenga aquí,
su gran herencia tiene, sí.
Arriba en gloria con Jesús,
quien le ha salvado por su cruz.