Ando con gozo todo el camino
cuando hay pruebas, cuando hay paz.
Cristo promete nunca faltarme,
dicho precioso, grato solaz.
Gozo indecible hallo en Cristo
nombre divino lleno de amor,
¡Aleluya!, sigo cantando
salmos e himnos a mi Señor.
Sombras arriba o alrededor
nunca se esconde mi guiador,
él es la luz del mundo entero,
y para siempre, mi Salvador.
En la luz brillante siempre gozando
sigo la senda de santidad.
En la mansión de Cristo en gloria
yo viviré por la eternidad.