Muchas cosas en los cielos los niños tendrán,
preparadas por su rey Jesús.
Ropas blancas, coronas de oro y también
lindas arpas las que tocarán.
Muchas cosas habrá, muchas cosas tendrán.
Muchas cosas veremos allá,
¡Oh, qué felicidad! Cuando estemos allí
cuántas cosas serán para mí.
En el cielo las calles de oro serán
y en ellas los niños pasearán,
y felices como ángeles cantarán
al cordero que nos rescató.
Junto al río de la vida se alegrarán
y el pan de la vida tendrán;
no existe más noche, ni muerte, ni dolor,
pues los cuida Jesús con amor.
De los niños el reino de los cielos será
y en brazos de Jesús descansarán.
Cantarán sin cesar en presencia del Señor,
danzarán rebosando de amor.