De Jesús escucha el tierno llamamiento
ven a él, pecador;
quiere darte su perdón, paz y contento,
ven a él, pecador.
Te llama con un tierno acento,
tu vida quiere redimir;
oye de Jesús el tierno llamamiento;
ven a él, ven a él.
Sólo él puede pleno gozo concederte,
ven a él, pecador;
en odiosa cruz por ti encontró la muerte,
ven a él, pecador.
No su voz de amor escuches, con desprecio
ven a él, pecador;
por tu salvación pagó Divino precio;
ven a él, pecador.