Cristo, nuestro jefe, nos lleva a la lid;
nunca cederemos si él nos dice: id.
En su justa causa se suele ignorar;
mas, le seguiremos fiel.
¡adelante, es la orden del Señor!
¡adelante, vamos sin temor!
¡adelante, canta ya su grey!
¡la victoria es cierta con el rey!
La furiosa lucha, larga no será
y a los vencedores nos congregarán;
donde cantaremos un himno triunfal,
sí, le seguiremos fiel.
Nuestro estandarte luce por doquier
con poder y gloria, siempre se ha de ver;
Cristo, nuestro jefe, al mundo venció,
sí, le seguiremos fiel.
Chile para Cristo, Cristo para él,
nuestras peticiones, siempre han de ser
y la gran victoria, nuestra Dios dará.
Sí, le seguiremos fiel.