Os venimos hoy a saludar
ante la presencia de Jesús.
Que él os guarde y él os bendiga
a todos, en vuestra juventud.
Ante todo, unidos estemos
preparados al juicio final;
siempre fieles permaneceremos
y en su nombre iremos a gozar.
Inspirados en amor Cristiano
os venimos hoy a visitar
y que ese fuego del santo cielo,
a todos nos venga a bautizar.
Acordaos en las tentaciones
de esta magna y grande bendición,
que Dios nos da para gozarnos
en tan perfecta comunión.
Y sometidos unos a los otros,
sujetos a la autoridad
que Dios ha puesto en esta iglesia,
para servirte en, verdad.