Bajo las estrellas, donde
anduvo mi Jesús
en el jardín de Getsemaní
donde luz no se vio,
Cristo se arrodilló
cuando oró bajo el olivar.
Bajo el olivar, bajo el olivar,
fue mi Cristo a solas a orar.
Sea tu voluntad, oh padre celestial
cuando oró bajo el olivar.
Cuando al Padre oró, muy triste se sintió;
fue amarga la copa que él bebió.
Vino un ángel del cielo y le confortó,
cuando oró bajo el olivar.
Siempre desea mi corazón
el amor que me dio
mi Jesús, cuando oró en el jardín.
¡Gloria sea dad a él;
mis culpas él llevó
cuando oró bajo el olivar!