Pecador ven al dulce Jesús,
Y feliz para siempre serás,
Que si tu le quisieres tener
Al Divino Señor hallaras.
Ven a el, pecador,
Que te espera tu buen Salvador.
Ven a el, pecador,
Que te espera tu buen Salvador.
Si cual hijo que necio peco
Vas buscando a sus pies compasión
Tierno hermano hallaras en Jesús,
Y tendrás en sus brazos perdón.
Si de enfermo te sientes morir,
El será tu doctor celestial,
Hallaras en su sangre también
Medicina que cure tu mal.
Ovejuela que huyo del redil,
Vuelve ya a tu benigno Señor,
Y en sus brazos llevada serás
Por tan dulce y amante pastor.