Sembradores, adelante,
no temáis al vendaval,
la semilla esparcidla
que la siega viene ya,
aunque ruja la tormenta
y se oponga a tu sembrar,
derramemos la semilla
en la tierra con afán.
A sembrar, con gozo hagámoslo,
con alegría de corazón,
aunque ruja el vendaval y se opongan los del mal,
a sembrar iremos sin temor,
aunque ruja el vendaval y se opongan los del mal,
a sembrar nos manda el Salvador.
Sembradores, el campo espera
que sembremos alrededor,
que se opone el maligno,
más podremos con la fe,
si llevamos la consigna
de sembrar y no dudar,
aunque rujan vendavales
la cosecha llegará.
Sembradores, qué bendito es sembrar
con fe y amor,
esparciendo la semilla
que nos diera el Salvador.
Sí, gimiendo y llorando
la simiente llevarás,
mas con gozo y alegría
las gavillas traerás.