Venid, con cánticos, venid
del trono alrededor;
con ángeles loor rendid,
a Cristo el Señor.
De alabanzas digno es el,
que en la cruz bebió
la copa de amarga hiel
que vida al hombre dio.
Cantad mortales por doquier,
cantadle con ardor;
Él siempre es digno de poder,
dominio y honor.
Con gozo, pues, alzad la voz
alegre voz alzad
y con los ángeles de Dios,
a Cristo adorad.